Hace unos días, mientras comíamos, un compañero de trabajo y amigo me sorprendió con una firme creencia que sostenía: no se veía con la necesidad de aplicar la misma meticulosidad en la vida personal como la que demuestra en la vida profesional. Esta afirmación me dejó sorprendido.
Siempre he mantenido la creencia que las mismas habilidades y actitudes que demostramos en el trabajo así como las que demostramos en la vida profesional fluyen de una a otra sin distingo. Y aún más útil se hace esta ósmosis si se es padre.
Si me preguntaseis sobre la conciliación, sobre el equilibrio trabajo-vida/vida-trabajo mi respuesta variará. A veces opinaré que el equilibrio vida-trabajo pasa por salir puntual, habiendo sido productivo, y dedicarme a mis quehaceres personales. Otras, en cambio, compartiré la versión norte americana de la conciliación dónde trabajo y vida van totalmente entreligados.
Y es hasta esta última opinión sobre la que quiero aprender hoy. Si tan difícil se está convirtiendo el hecho de conciliar ¿por qué no sacamos provecho de ello? ¿por qué no usamos actitudes y habilidades del trabajo para aplicarlas a nuestra vida personal; y vice versa? Aprendamos hoy algunos puntos a los que prestar atención.
Partiremos de dos artículos originales, en uno se detallan 8 habilidades de nuestra carrera que nos pueden hacer mejores padres:
- Pensamiento Estratégico
- Gestión Individualizada
- Gestión del Tiempo
- Paciencia
- Colaboración
- Comunicación en dos sentidos
- Elegir las Batallas
- Inteligencia Emocional
En el otro se detallan 5 habilidades que como padres nos pueden hacer mejores en nuestro trabajo:
- Resolución de Problemas
- Visualización
- Creación de Equipo
- Estar en el Momento
- Escuchar
Por si no nos habíamos dado cuenta, ser padres tiene similitudes con la gestión de los empleados en el trabajo. Ambos roles son sobre el liderazgo y ambos se basan en la construcción de relaciones de alta calidad (Julie Holliday Wayne, profesora asociada en la Universidad de Wake Forest).
«El liderazgo se ha definido en cuanto a una persona que guía, inspira o influencia a otras en cara a metas y objetivos compartidos»; del mismo modo «los padres guían, influencian y colaboran en el desarrollo de sus pequñ@s con el objetivo de hacer que éstos sean capaces, sean miembros responsables de sus familias, organizaciones y comunidades»
Posiblemente «los empleados» de tu familia sean más jóvenes (y más rebeldes); pero el aplicar las mismas técnicas que usaríamos en el trabajo nos podrá ayudar en casa también.
Habla con cualquier emprendedor@ o líder de negocio y a menudo admitirán que su compañía es su «bebé». La han traído a la vida, han pasado tiempo haciéndola crecer y están emocionalmente ligados a su crecimiento.
Según Katherine Hays (emprendedora); «l@s niñ@s lo miran todo con ojos frescos; todo es la primera vez […] Si observamos a l@s niñ@s veremos que sus observaciones y conclusiones son, a menudo, específicas, concisas e inesperadas. […] como padre estas entrenado en pensar constantemente en soluciones«
Ser padre aumenta también tus habilidades de liderazgo. Te fuerza a ser más eficiente con tu tiempo y esfuerzo; cosa que te lleva a más pensamiento estratégico a medida que intentas tenerlo todo hecho.
Repasemos pues estas habilidades que podemos intercambiar entre trabajo y vida personal:
Del Trabajo a Casa: Pensamiento Estratégico
Las compañías que tienen una visión clara de hacia donde van y qué valoran a menudo consiguen mejores resultados que aquellas que no poseen esta visión. De modo similar, los padres necesitan tener una visión de su familia que incluye valores y prioridades.
«Si los padres no tienen una visión clara para su familia y para el futuro de sus hijos y no tienen un plan para llegar a éste futuro; probablemente acabarán en un lugar dónde mejor sería no haber llegado»
Cuando sea apropiado, comparte tu visión y valores con tus hijos; ayúdalos a entender qué es lo que quieres hacer como família.
«Por ejemplo, mejor que centrarse en la regla como ‘prohibidos los móviles a la hora de cenar’; ayúdales a entender qué valor familiar se esconde detrás de ella, como podría ser el ‘estar tiempo juntos'»
De Casa al Trabajo: Resolución de Problemas
Encontrar papeles perdidos, coordinar las citas con el dentista, encontrar un lavabo para tu hijo en proceso de dejar los pañales; los padres siempre están solucionando problemas. «Como padre te has entrenado en estar pensando constantemente en soluciones […] Y, a menudo, tu familia debe trabajar como un equipo para solucionarlos»
Ayudar a los niñ@s a través de la prueba y error también nos puede ser de ayuda en el trabajo. «Nuestro rol como padres es crear un entorno donde el coste del error nunca es grande y donde es, de lejos, ganado por el entendimiento de proceso iterativo […] es lo mismo en el trabajo. Nuestra tarea es establecer incontables mini-situaciones de ensayo-error de modo que podamos llegar rápidamente a la respuesta correcta y entender realmente la raíz del problema que hemos solucionado, sin tomar riesgos significativos»
Del Trabajo a Casa: Gestión Individualizada
Similar a un manager que asienta expectativas individualizadas para los empleados, los padres deben establecer estándares únicos para cada hijo en el modo que crean más efectivos. No todos l@s niñ@s son iguales, de modo que, una cosa que funcione en uno; no tiene porque funcionar en otro; aunque sean hermanos.
De Casa al Trabajo: Visualización
Cuando eres padre, te focalizas en el panorama, en qué es lo que se debe hacer y quién lo está haciendo. «Cuando sales fuera con los niños, tienes que pensar de antemano todas las cosas que podrían pasar […] necesitas visualizar el proyecto entero; conceptualizando el negocio de la familia»
Esta habilidad es de alta utilidad en el trabajo. «Los retos podrían impactar en un proyecto con lo que nos acostumbramos a pensar a medio-largo plazo […] los padres atraen un fuerte foco a la gestión de proyectos»
Del Trabajo a Casa: Gestión del Tiempo
Ser un líder efectivo significa establecer prioridades y conseguir objetivos. Sea como fuere, con un calendario de papel, con una aplicación online o con un paquete de post-its; tod@s tenemos nuestro modo de llegar a entregas y de gestionar tareas.
«Llevando estas habilidades organizacionales del trabajo a casa, los padres podrán gestionar las demandas constantes que vienen en forma de trabajos, deberes, reuniones de tutorías, festivales, citas médicas, todo ello mientras disfrutamos de la dicha caótica de lo que llamamos parentalidad».
Los buenos líderes también encuentran tiempo para planificar, para hacer actividades de construcción de equipo y de fomentar la cultura de la compañía; y las mismas necesidades aparecen en casa.
«Reservarse tiempo tan solo para estar en casa es similar a reservarse tiempo para escribir correos o asistir a reuniones en el trabajo»
De Casa al Trabajo: Creación de Equipo
La gestión de equipo y la motivación es una habilidad que se transfiere de casa al trabajo. «Tener una actitud de ‘a mi manera o nada’ casi nunca funciona, ya sea en casa on en el trabajo […] Tenemos que embarcar a las personas. Debemos tener claro cuándo hacerlo y cuándo no.»
También ayuda tener una aproximación individualizada: «No tratas a tu pareja del mismo modo que tratas a tus hijos y lo mismo debería ser verdad para las diferentes personalidades en el trabajo»
Del Trabajo a Casa: Paciencia
Los empleados van a cometer errores, y los buenos líderes saben que así es como aprenden qué es lo que no funciona y cómo arreglarlo.
Esta habilidad aplica también a la parentalidad. «Desde la perspectiva de la paciencia, una tarde con mi hijo de tres años sería mucho más tranquila si lo hiciese todo por él […] pero de este modo, no lo aprendería a hacer por sí solo. Aunque se pueda frustrar con algunas tareas, no tarda demasiado hasta que las consigue»
De Casa al Trabajo: Estar En El Momento
«Los niños te fuerzan a estar con ellos en el momento que estais juntos; y es un hábito fantástico, además de uno que puede modelar y dar soporte en tu equipo» Añadiendo productividad, creatividad y tu conexión con el contexto que te rodea.
Estar en el momento es importante para los negocios que crecen rápidamente. «No se podría innovar a la ratio necesitada y solucionar todo lo que tenemos que solucionar sin tener presencia completa y sin concentrarnos en una única cosa a la vez»
Del Trabajo a Casa: Colaboración
Trabajar juntos como un equipo significa compartir metas comunes y ayudarse los unos a los otros para conseguirlas. Un entorno de soporte y estimulante es un elemento muy importante en el trabajo y, como no, puede ser un gran beneficio en casa también.
«Cuando nos acercamos a nuestro hijos con una actitud de ‘estamos todos en esto’; sea cual sea el objetivo (limpieza semanal o aprender a esquiar) los anima al ver que no están solos […] Mejor aún, significa que si todos trabajamos juntos y ponemos de nuestra parte en ese mejor bien, alcanzaremos las metas comunes de un modo más razonable y eficiente»
De Casa Al Trabajo: Escuchar
Hacer que los preadolescentes y los adolescente se abran cuesta mares; pero cuando lo hacen, los padres deben callarse y escuchar. «Con los niños, el escuchar va más allá; así que ofrezcamos escucha activa, hagamos preguntas abiertas»
En el trabajo, la habilidad de escuchar nos ayudará a entender mejor qué es lo que los empleados necesitan para salir con sus objetivos. «A veces, las personas necesitan desahogarse. Cuando lo han sacado todo, es cuando los podemos guiar, cuando les podemos ofrecer puntos de vista; parecido a cuando un niño ha tenido un mal día con la maestra»
Del Trabajo a Casa: Comunicación en Dos Sentidos
Los buenos líderes primero buscan entender para luego ser entendidos. Todo esto pasa por hacer preguntas, por escuchar sin interrumpir y mostrar interés en lo que se está diciendo. (¿Os suena? Lo mismo que en el punto anterior)
«Debido a la relación padre-hijo, es fácil caer en la trampa de ser muy directivo y dar guía; cuando lo que los niños simplemente necesitan sentirse escuchados y sentir que alguien se preocupa por ellos […] Del mismo modo que ocurre con los líderes, lo padres serán mejores comunicadores con sus hijos si pueden usar lenguaje específico, sin rodeos; eso sí; que describa el comportamiento y no la persona»
En lugar de decir: «Eres un vago. Siempre estas en tu habitación jugando a los vídeo juegos y nunca pasando tiempo con nuestra familia»; hecho que hará que se pongan a la defensiva; intentemos algo como «Has pasado dos horas en tu habitación hoy. Me gustaría que pasases ahora una hora con el resto de la familia ahora».
Del Trabajo a Casa: Elegir Las Batallas
A veces ocurre que aparece diversidad de opiniones en el trabajo (sino mal iríamos 🙂 ) y en frente de cada una de ellas debemos decidir si retarlas o no. Además, no todas las batallas del trabajo merecen ser peleadas.
«Hay algunas situaciones en las que debo ensarzarme en tensas discusiones como mejorar un programa o cambiar una política que debe ser ajustada; pero otros casos no se merecen la energía mental y emocional que requiere el enfrentarse a ellos»
Esto también aplica a la parentalidad. «Si mi hijo de tres años quiere llevar puesta su camiseta de heroes de marvel, entonces si que es una batalla que librar; ya que es una camiseta vieja, además es de verano y no quiero que enferme» Por otro lado, si lo que quiere es llevar ropa que no conjunta, el pelearse por eso no lleva a ningún otro lado que perder nuestras energías.
Del Trabajo a Casa: Inteligencia Emocional
Los buenos líderes demuestran inteligencia emocional en cuanto entiende sus propias tendencias, fortalezas y debilidades y de modo análogo pueden leer y responder a las emociones de los demás. Esto ayuda a construir puentes fuertes en las relaciones con los empleados y estas habilidades son también esenciales en la parentalidad.
«Una madre emocionalmente inteligente sabe que cuando ha podido dormir tan solo 4 horas por culpa del bebé y su suegra le llama por teléfono, lo mejor es dejar que salte el contestador y hable con ella más tarde»
«Un padre emocionalmente inteligente normalmente responderá de modo calmado cuando su hijo se porte mal o cuando éste no alcance las expectativas en casa, en el colegio o en cualquier otro lugar. Al fin y al cabo, la parentalidad está plagada de adversidades y por eso es importante que los padres se mantengan positivos»
Todo está enlazado, como he querido demostrar en la imagen de cabecera de este Brain Feeling: la conexión de la familia y la carrera con la conciliación. Entonces ¿por qué no sacarle partido para ser mejores en los dos lados? 🙂
Buen Martes!! 🙂
Artículos Originales:
- «8 Career Skills That Make You A Better Parent«
- «5 Parenting Skills That Make You Better At Your Job»
Ambos en FastCompany.com
Feel the Brain 
Debe estar conectado para enviar un comentario.