Ya aprendimos un poco sobre la Escucha Activa en los Brain Feelings: «6 modos para ser mejor ‘Escuchador’» y «Qué es lo que hacen los buenos escuchadores«. Hoy me gustaría aprender un poco más sobre esta materia de manos de un artículo de la escritora Canadiense, Sara Saddington.
Hay dos principios básicos (vale, hay más, pero éstos son los que nos servirán para este Brain Feeling) con los que debemos esforzarnos en convivir:
- Entender que cada un@ es el propio héroe de su propia historia
- Asumir que l@s demás tiene buena intenciones
En nuestro día a día, ya sea en el trabajo, en casa o compartiendo espacios públicos con completos desconocidos, todo se basa en la comunicación Necesitamos escuchar y responder a las señales que l@s demás están compartiendo para entender hacia donde queremos ir (literal o metafóricamente). A pesar de este hecho, much@s de nosotr@s somos muy mal@s a la hora de escuchar. Sara, tiene una teoría sobre por qué ocurre esto.
Afirma que ella es la persona más importante del mundo (para ella, en mi caso no aplica). Vive en su cuerpo. Como tod@s tiene que escuchar su autodiálogo en su cerebro. Sus finanzas, sus relaciones personales, sueños y ambiciones: todos ellos tienen un impacto directo en la calidad de su vida: su felicidad, su sentido de la seguridad, el sentido del ‘yo’.

El interactuar con otr@s, le ayuda a recordar que, para ell@s, ell@s son la persona más importante del mundo. A penas van a darse cuenta de sus problemas. No les importa si ella está dolorida o malhumorada. No tienen interés alguno en oír hablar sobre sus sueños (ya están lo suficientemente ocupad@s para entender su último sueño bizarro o haciendo cálculos para llegar a final de mes).
Dado que somos human@s que nos centramos en nosotr@s mism@s, es muy fácil creer que las acciones de l@s demás son sobre nosotr@s. El jefe, demasiado ocupado para nuestra reunión regular me evita (a lo mejor he hecho algo que le enfada). Mi pareja parece distante (igual está enfadad@ porque nunca bajo la basura). Es@ camerar@ amigable y eficiente debe estar flirteando conmigo ya que soy encantador@, no porque sea un@ buen profesional, sino porque se trata de mí.
Excepto que no.
Asumir que las personas con las que interactuamos tienen buenas intenciones nos dará un buen empujón para poder mitigar estas creencias. Son los héroes de sus propias historias, y están haciendo lo mejor que pueden para arreglárselas. Del mismo modo que nosotr@s no estamos en nuestro mejor estado cuando estamos cansad@s o malhumorad@s, tampoco lo están l@s demás. No me están haciendo esas cosas a mí. Están intentando lo mejor que pueden hacer para sí mism@s en ese momento. Por supuesto que también hay gente con la que es difícil tratar y gente que les encanta ser un@s imbéciles. Pero hay poca cosa que hacer con ell@s, y asumir que tod@s actuamos de buena fe nos ahorrará tiempo y energía (no nos preocuparemos por analizar ese comportamiento o esa intención).
Activa Tus Capacidades De Escucha Activa
Escuchar trata sobre la empatía. Se trata de salir de tu propia cabeza y adentrarte en un mundo en el que no eres el personaje principal, se trata de interesarse en puntos de vista alternativos. En primera instancia, puede ser increíblemente difícil. Es una de las mejores herramientas que podemos usar para tener relaciones más efectivas.
Aprendamos algunas cosas que deberíamos hacer y otras que no deberíamos hacer al escuchar para mejorar y hacer más efectivas nuestras relaciones. Te sorprenderás de lo que puedes llegar a oír.
Te Recomiendo Que… ✅
Asumas Que Hay Buena Intención
Si partes de la posición que mucha gente está haciendo lo mejor que puede podrás dejar de lado parte de la negatividad que viene de asumir que van a por ti.
Un@ compañer@ malhumorad@ puede estar más estresado por todo el viaje que ha tenido que hacer hasta el trabajo que no por alguna cosa que hayas hecho tú. Esa tía que nunca recuerda en que trabajas no es que no se acuerde ni piense en ti, es que tan solo te ve una vez al año y está ya bastante ocupada son su propia familia.
Haz Preguntas Para Aclararte
¿No entiendes una palabra o un acrónimo? Pregunta. Si tan solo asientes, no ganarás ningún punto. En las conversaciones personales, podemos decir: «cuéntame más de ello«, si aparece algún tema que no entendemos del todo. También en el trabajo es un modo que puede llevarnos a crear conversaciones muy interesantes.

Aprende A Reconocer Lo Que No Se Ha Dicho
Un cambio súbito del lenguaje corporal, en el tono o el ritmo de su voz, un cambio de tema (todos estos son indicadores de que hay más cosas en la historia). Síguelo dócilmente, pero presta atención a las pistas de incomodidad y no aprietes demasiado.
Reflexiona Sobre Lo Que Se Ha Dicho
Tomarse un tiempo para resumir lo que se ha dicho, y verificar tu nivel de comprensión, no tan solo hará que la otra persona note que valoras su perspectiva, también ahorrará tiempo y frustración.
Reflexionar sobre lo que has oído es un modo muy poderoso de estar seguro de que estás hablando de lo mismo y trabajando para alcanzar el mismo objetivo.
Podemos usar fórmulas como:
- «Si lo he entendido bien, parece que te sientes…»
- «Solo para tener claro lo que está pasando, el retraso en el proyecto es por [estas] causas externas»
- «No estoy seguro de lo que quieres decir, pero por lo que he oído es [esto] ¿Me pierdo algo?»
No Te Recomiendo Que…⛔️
Soluciones Problemas (si no te lo han pedido)
«Siento que estés pasando por esto», «Te creo», como mucho: «Dime si hay algo que pueda hacer». Cuando das consejos que no te han pedido o tratas de «arreglar» a las personas, estás proyectando tus propias inseguridades y la necesidad de controlarlas. Te estás haciendo el héroe de su historia. No lo hagas.

Decir Rápidamente Lo Que Piensas Justo Cuando Han Acabado De Hablar
Una pausa no es necesariamente una concesión. En lugar de ello, procesa qué es lo que se ha dicho, haz preguntas para indagar más, dales un momento para que acaben de recopilar sus pensamientos. La escucha activa no trata sobre esperar tu turno para hablar.
Cambiar Súbitamente De Tema Sin Acordar El Cambio
Una buena conversación inevitablemente divagará y cambiará de dirección varias veces, pero un cambio súbito en el tono o en el tema de una conversación le indica a la otra persona que no te importa qué es lo que ha dicho.
Podemos usar fórmulas como «cambio radical«, para indicar al otr@ que hemos escuchado lo que estaba diciendo, que un punto de lo que ha dicho nos ha recordado algo totalmente diferente, y que queremos compartirlo antes de volver al tema original.
Con estos signos, reducimos la frustración y demostramos respeto por l@s otr@s mientras que seguimos permitiendo que la conversación continue orgánicamente.

Ser un buen oyente, no es una cosa que sea siempre natural, pero creo que es una cosa en la que vale la pena trabajar. Cuando realmente escuchas lo que l@s otr@s están comunicando (cuando puedes reconocer que la conversación no trata sobre ti y tener empatía hacia esa perspectiva) podrás abrir muchas puertas a una relación más profunda. Deja que otr@ sea el héroe por unos momentos. Escucharás cosas maravillosas.
Buen Jueves!! 🙂
Artículo Original: «Active Listening: The Gift that Keeps Giving» en Thin Difference